LA TV QUE NOS ALIMENTA

E
stos días me senté frente al televisor brindándole la atención que le había negado en los últimos meses gracias a la expansión de la banda ancha en mi piecita del fondo. Y a quienes dicen que en la tele no hay nada yo les preguntaría que canales miran. Y para los que exigen una pantalla con cultura para todos les digo que esta semana asistí azorado a una dosis de material didáctico que no dan ni en la mejor escuela privada. Ví dos abuelitas siliconadas peleandose por quien parecía más pendeja físicamente y ví lo que significa la paz después de un tiempo de guerra, sellada por un fino ejemplo del amor más sincero, un beso en la boca entre ambas. Ví que la clase dirigente que nos llevó al borde del abismo (Menem, Rodriguez Saa, Puerta) busca redimirse de un pasado no tan lejano tratando de acceder nuevamente al poder que ya no los reconoce, mostrándome que todavía existe gente que piensa en nuestro futuro bienestar. Ví programas que se propinaban munición gruesa unos a otros (Canosa a Villarruel, Villarruel a Suar, Pergolini a Tinelli, De la V a Sofovich, Sofovich a Rial, Rial a todo el mundo) lo que debe ser entendido como una altísima apuesta al entretenimiento del televidente y no una lucha desmedida de egos. Ví como en una conferencia en México un presidente negaba que hubiera una crisis energética en su país de origen en el preciso instante que 6 provincias se quedaban sin luz, palabras que obviamente deben ser tomadas como una medida tranquilizadora para que la gente no se ponga paranoica. Ví puteadas a mansalva, escupitajos a las cámaras, gestos soeces y descalificadores de todo tipo pero es para mostrar que la TV está con el pueblo, hablando su mismo lenguaje. Ví ministros ofuscarse por pedidos de justicia contra actos de corrupción y está bien, los periodistas no entienden que se debe respetar ciegamente la cadena de mandos, que esto es una campaña de la oposición en época preelectoral. Ví entrevistadores desinformados, locutores con mala dicción y animadores desanimados. Ví la vida como realmente es. Y después le dicen la caja boba...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y hay más para ver!!
Por eso amo tanto internet, al menos yo elijo qué ver y escuchar.


Saludos!